¿Tienes 2 minutos? Si te quedas hasta el final ¡NO TE ARREPENTIRÁS! No quiero aburrirte con otro artículo más sobre errores comunes que puedes cometer en el gimnasio como no calentar bien, olvidarte la toalla y un sinfín de obviedades que estarás aburrido de leer y esuchar.
Por eso, he recopilado 6 prácticas o actitudes que debes evitar para optimizar tus entrenamientos.
¡Es un clásico! La mayoría de gente, seguramente tú y yo en muchas ocasiones, utilizamos nuestro SmartPhone en nuestros entrenamientos.
¿Tan difícil es dejarlo en la taquilla una horita o el tiempo que estés en el gimnasio? Si no lo usas, te doy la enhorabuena y te animo a saltarte este punto.
Si eres de los que lo utiliza, decirte que la cantidad de tiempo que pierdes utilizándolo juega doblemente en contra de tu rendimiento.
Y te preguntarás el porqué. Muy fácil, 3 motivos claves:
Seguro que has visto el típico grupo de colegas yendo al gimnasio en manada y rodeando el Press Banca como si regalasen camisetas.
Yo lo hacía, me dí cuenta de que era un error y decidí evitar ir con mis colegas a entrenar, empecé a ir con uno de ellos, en pareja. ¿Por qué? Porque entrenar con otra persona hará que entrenes mejor, te echará una mano para realizar la última repetición y te empujará a ir al GYM los días que no estés tan motivado para entrenar.
Tómate el entrenamiento como si fuera un trabajo, un trabajo que te encanta. ¡Disfruta de tus amigos fuera del gimnasio!
Los días más productivos en el gimnasio son los que vas con un plan claro, con una rutina definida. No importa si has decidio cuál va a ser tu entrenamiento 5 minutos antes de entrar por la puerta del templo. Lo importante es que tengas un plan y desde el minuto 1 vas a aplicarlo.
Esto te ayudará a tener un foco en tu entrenamiento, a trabajar con intensidad.
Además, una vez termidado, podrás comprobar su efectividad y estudiar si te ha funcionado, si te ha estimulado bien y si debes mejorarlo en algún aspecto. Sin un plan de entrenamiento seguramente entrenes con menos intensidad, tu entrenamiento tenga menos sentido y lo más importante, no entrenarás de forma óptima.
No lo harás porque no tienes claro cual es la envergadura de tu rutina, no sabes cuánto vas a tardar. Tampoco sabes las carga de trabajo que tienes que aplicar, y cómo balancearla para completar bien el entrenamiento.
Lo más seguro es que acabes haciendo las 4 máquinas que estén libres y encuentres alguna excusa para irte a casa. Por ejemplo, se te ha hecho tarde, ya habrás entrenado suficiente o te acordarás de que te dolía algo y mejor no forzar la máquina.
Lo importante, el objetivo del tiempo que estás en el GYM es poner el foco en tu entrenamiento y no perderlo nunca.
Por desgracia, en el gimnasio no nos podemos librar fácilmente de distracciones. Siempre habrá gente que intente llamar tu atención de alguna manera o la llame sin hacer nada, puede que por su físico o su estilismo.
Intenta que no te distraigan y concentrarte en cumplir con los tiempos de trabajo y recuperación que tienes planeados.
Este punto es complicado, todos sabemos que los ejercicios que más nos cuesta realizar son los que más nos van a funcionar. Con los que más estimulación vamos a conseguir y más beneficios nos van a aportar en nuestra preparación.
Pero lo cierto es que nuestra mente siempre intenta evitarlos, siempre encuentra una excusa para que intentemos saltárnolos o sustituirlos por un ejercicio en alguna polea que nos cueste menos.
Oblígate a retar a esos ejercicios, realízalos con más frecuencia y consigue dominarlos. Te acabarán gustando.
Intenta evitar esas horas de la tarde donde está tu gimnasio colapsado. Puede que tu horario te impida ir a otras horas pero evítalas en la medida que te sea posible.
Si no, seguramente no podrás realizar todos los ejercicios que tienes pensados, o no en el orden previsto. Mucho menos propable es que consigas acaparar dos maquinas si vas a hacer superseries. Para las superseries también es muy bueno trabajar en pareja, cada uno ocupa un ejercicio y te vas turnando con tu pareja en cada serie.
Una cosa que suelo hacer yo, y que te irá muy bien, es hacer los días de descanso entre semana.
Por varios motivos, el primero es que la mayoría de las personas suelen descansar el fin de semana, por lo que a toda esa gente no te la encontrarás en tu entrenamiento el sábado o el domingo.
El segundo, porqué tendrás más tiempo para entrenar sin prisas, también para comer mejor, para descansar y para evitar esas horas punta.
Todos estos motivos harán que conviertas dos días de entrenamiento mediocres en dos entrenamientos de calidad a la semana. Sin duda, si sumas 2 entrenamientos de calidad todas las semanas del año lo notarás en tus resultados.
Podríamos hacer una lista de 1 millón de prácticas que son contraproducentes en nuestros entrenamientos. Y estoy seguro de que tú puedes aportar más que nosotros y ayudar a los lectores del blog a optimizar sus entrenamientos. Si es así, ¡déjalas en un comentario!